Para entender de qué hablo, es recomendable leer primero el post que está acontinuación de éste, el cual muestra los resultados de la Encuesta para elegir a los Mejores Discos del 2007.
Resulta que en la masiva votación de 146 personas hubo una dura lucha entre Radiohead y Arcade Fire por llevarse el premio al mejor álbum del año. Pudiendo elegir por hasta 10 discos, In Rainbows fue mencionado por casi el 42% de los que votaron ganándole con 61 votos al Neon Bible de Arcade Fire que obtuvo sólo 5 votos menos. Que estos dos discos obtuvieran las primeras posiciones no fue ninguna sorpresa y en varios foros me pronosticaron que sería así. Mientras Radiohead es una de las bandas más admiradas y respetadas del planeta, Arcade Fire en menos de 4 años se ha transformado en una banda de culto, revolucionaria y vanguardista. Tal vez sea curioso el siguiente dato: mientras los votantes latinos privilegiaron el trabajo de la banda inglesa, los votantes anglosajones prefirieron el de los canadienses Arcade Fire.
En tercer lugar y con exactamente la mitad de votos de Arcade Fire (28) aparece Icky Thump de The White Stripes, lo cuál muestra la importante diferencia que existe a la hora de las preferencias por los primeros dos. En todo caso, el disco de los White Stripes es probablemente su trabajo más arriesgado y extravagante a la fecha y, si bien, los gustos personales influyen a la hora de votar no se puede desmerecer la calidad musical del disco.
Los votos estuvieron cargados hacia el Indie Rock, pero su veta más experimental apareció representada por otros álbums que se situaron entre los 10 primeros como Strawberry Jam de Animal Collective, (4º lugar), el Person Pitch de Panda Bear (7º) y Ga Ga Ga Ga Ga de Spoon (9º). En la veta más pop del Indie obtuvieron buenas posiciones The Shins (6º) y of Montreal (9º). Sin embargo, lo que más me llamó la atención es el gran respaldo del inclasificable álbum debut de Battles titulado Mirrored (21 votos), en lo personal sus vocalizaciones ridículas y su sobre-experimentación me lo hicieron indigerible, salvo por un par de canciones más instrumentales.
Por otro lado, Interpol parece haber cultivado una buena base de fans, pues a pesar de que, en mi opinión Our Love to Admire es bastante más pálido que Antics o Turn Out the Bright Lights obtuvo el 5º lugar.
Más discos indie se colaron entre el lugar 10 y el 20 como Iron & Wine, LCD Soundsystem, PJ Harvey, The National y Modest Mouse.
En el ámbito del metal, las mayores votaciones fueron para Porcupine Tree con Fear of a Blank Planet (17 votos), Megadeth y Dream Theater (15 votos cada uno) seguidos del The Roundhouse Tapes de Opeth (13 votos).
Si bien recibieron un número no despreciable de menciones me hubiera gustado que les hubiera ido un poco mejor a grandes discos como Live At Massey Hall de Neil Young (13 votos), The Stage Names de Okkervil River (sorprendentes 12 votos) o The Flying Cup Club (aún más sorprendentes 11 votos).
Bajo lo esperado para los que considero muy buenos discos estuvieron Armchair Apocrypha de Andrew Bird e In Our Nature de José González.
En todo caso, más allá de agrdecer a las 146 personas que votaron (el próximo año espero difundir aún más la votación para aumentar el número y la legitimidad del resultado), lo interesante es la gran cantidad de discos de gran factura que se editaron este año. Como para mantener la esperanza en el futuro de la música.
2 comentarios:
el de Artic Monkeys me parece un gran candidato
Coincido con los puestos.
www.puntoun.com.ar Revista de interes general
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